Impulsa Jorge Gaviño a jóvenes artistas. El artista tiene que luchar entre el dilema de crear y subsistir: Jorge Tanamachi.- El arte contribuye a la sanación, dijo Alejandro Loyola, joven creador del Taller Huachinango.
Por J. Adalberto Villasana
Ciudad de México, a 12 de julio de 2024. – El diputado Jorge Gaviño Ambriz respaldó el ímpetu de los jóvenes artistas y creadores que impulsa el Taller Huachinango, durante la inauguración de los vitrales “El Abrazo o La Concordia”, y “El Laberinto”, en el Salud Center.
“Viendo al grupo de jóvenes que crean arte y develando cosas siempre me siento muy orgulloso, realmente disfruto”, comentó el legislador.
En el evento, Jorge Tanamachi, líder del Taller Huachinango, señaló que los artistas contemporáneos tienen el dilema de navegar entre crear y vender sus obras para seguir existiendo, pues deben pagar todos los insumos que un humano necesita para sobrevivir, como renta y comida.
Explicó que la obra se tituló “El Abrazo o La Concordia”, que se basa en el mito platónico sobre los seres humanos que tenían cuatro brazos y cuatro piernas, dos rostros, viendo hacia el frente y hacia atrás, y “éramos tan poderosos y arrogantes que competíamos con los dioses. Como castigo, los dioses nos dividieron en dos y así se explica el mito del amor”. Dijo que para los creadores de la obra, la salud fue representada en dos corazones que están en equilibrio, en homeostasis.
En el muro contrario se encuentra la obra “El Laberinto”, que representa la ausencia de equilibrio o enfermedad y las salidas que podemos tomar para escapar de ese estado. En el vitral se pueden observar varios insectos, que protagonizan mitos como de Ariadna y Teseo; o el Escarabajo, de origen egipcio, además de una mariposa y una polilla.
Alejandro Loyola, uno de los jóvenes artistas que participó en la creación, afirmó que el arte contribuye a la sanación de las personas, “al permitir viajar al espectador a partir de lo que se observa en la obra y entrar de nuevo en armonía al ver los colores”, como en el caso de los vitrales.
Explicó que la técnica que se eligió fue Tifanny, en donde se juntan las piezas de vidrio mediante un proceso de soldado con una cinta de cobre, lo que permite jugar más con las líneas, además que lleva un plomeado.